El Bayern a lo Jesús Gil

Muchos recordaréis el inconfundible estilo de Jesús Gil a la hora de gestionar el banquillo del Atlético de Madrid. En sus 25 años como presidente tuvo 34 entrenadores. Solo Antic (que hizo el doblete el año de su debut) y Luis Aragonés (una institución en el club) duraron una temporada completa.

Gil comenzó su andadura como Presidente fichando a un jugador campeón de Europa (Futre) y a un entrenador campeón del mundo, Menotti. En teoría, el conocido y reconocido técnico argentino venía para liderar al Atleti durante muchos años. Duró poco más de seis meses. Y eso que ganó 0-4 en el Bernabéu y cogió algo de aire, sino probablemente no se come ni el turrón. Cuando fue despedido, Menotti comparó a su ex presidente con Al Capone. La respuesta de Gil no tuvo desperdicio “le he echado antes de que corra la sangre”.

Liquidado todo un campeón del mundo, Gil se envalentonó y fue echando uno tras uno, y de forma fulminante, a todos los entrenadores que él mismo fichaba. Le daba igual si se trataba de entrenadores prometedores o consagrados, casi todos recibían el finiquito a los pocos meses de su contratación. Clemente (que había ganado la liga con el Athletic de Bilbao) y Sacchi (que habían conquistado la Copa de Europa con el Milán) le duraron apenas 31 y 30 partidos respectivamente. Maturana (que maravilló al mundo con la selección de Colombia) no tuvo tanta suerte. Nueve partidos fueron suficientes para que Gil decidiera que este tampoco era su hombre. Gil alcanzó su climax en la temporada 93-94 en la que el Atleti tuvo seis entrenadores (contando los interinos). Así era Gil con los entrenadores.

En el Bayern desde que Salihamidzic (o SalihamidGil, como se prefiera) está como director deportivo la paciencia dura poco más que la del ex presidente del Atleti. El dirigente bosnio del Bayern fichó a Kovac para el club bávaro y quince meses después ya estaba en la calle. Se puso como entrenador sustituto de forma interina a Flick y sus resultados espectaculares (ganó la champions y otros cinco títulos) provocaron que se le renovara con un amplio contrato que llegaba hasta junio de 2023. Tan solo una temporada después, Flick anunciaba de forma inesperada que dejaba el cargo “tras unas semanas difíciles y diferencias internas” . Al parecer, SalihamidGil no había llevado muy bien la eliminación de la Champions ni la cuota de poder que estaba cogiendo Flick.

Para sustituirle, SalihamidGil fichó a la joven promesa que codiciaba toda Europa. Nagelsmann tenía 33 años y había revolucionado la Bundesliga con su Leizpig. Su club no lo quería dejar salir pero el Bayern lo tenía claro, este era su hombre que iba a marcar una nueva dinastía en Alemania y en toda Europa. Indemnizaron al Leizpig con 20 millones de euros y le ofrecieron a Nagelsmann un contrato de cinco años para demostrar la plena confianza que tenían con él.

Hace diez días el Bayern perdió contra el Leverkusen y SalihamidGil rajó de la actitud del equipo. Pocas horas después, Nagelsmann era despedido. Es cierto que el Bayern va segundo en la Bundesliga y esa no es una buena posición para un equipo que lleva diez ligas consecutivas. Pero no es menos cierto que está a un solo punto del líder y, sobretodo, que el equipo lleva unos números impresionantes en Champions. Ha jugado ocho partidos y los ha ganado los ocho incluyendo dobles victorias frente a Inter, Barsa y PSG. Si a eso sumamos que a Nagelsmann le quedaban más de tres años de contrato, su destitución cogió por sorpresa a todo el mundo, salvo a SalihamidGil que parece tampoco se llevaba muy bien con el joven entrenador.

Quizás los rumores de que el Real Madrid estaba interesado en fichar al prestigioso Tuchel (si finalmente Ancelotti se va a la selección de Brasil) hayan acelerado la decisión del Bayern para que no les quiten a su sustituto ideal.

Hay que tener presente que Tuchel tiene fama de tener un gran carácter, de hecho, ya ha sufrido sorprendentes y prematuros despidos en PSG y Chelsea a pesar de haber cosechado grandes éxitos deportivos. ¿Será Tuchel la próxima víctima de SalihamidGil? ¿O se enfrentará con él? Nadie lo sabe pero a falta de Gil no le podemos quitar ojo a SalihamidGil. Vayamos cogiendo las palomitas.

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Hasta el miércoles que viene.